Tercer día….Burlada-Puente la Reina

Nos despedimos de Araceli y los niños y salimos camino de Pamplona, es un camino lleno de huertas y tranquilo, las murallas de la ciudad son impresionantes, pasamos el Portal de Francia y entramos en la ciudad que no tiene desperdicio y la gente es de lo mejor que te puedas encontrar, vamos camino de las Tres Zetas….y paseando por las calles encontramos la tienda, “…ya tenemos botas…” , al salir nos tomamos un vino y un pintxo de tortilla en el bar mas antiguo de Pamplona, (eso dicen), el Rock, encantadas de la vida, pero todavía no hemos empezado la etapa y estamos acojonás con el Perdón, minada la moral totalmente,” que si es la etapa crucial, que si pasas esta ya está, pero que en esta se vuelve mucha gente, que el cansancio empieza a acumularse, que patatín, que patatán…”, que llegamos después de una subida fuerte pero corta, que dicen que es la antesala del Perdón, a Cizur. Allí paramos en una fuente y charlamos con dos viejos mumajos, compro vitaminas efervescentes en la farmacia….jajajaj….compramos pan chorizo y salchichón y llenamos la bota de vino de la zona…(la cosa es retrasar lo inevitable)..vemos los molinos de viento a lo lejos y allí decidimos separarnos otra vez, yo por el camino antiguo y Dolo, (que ya empiezo a llamarla así), por otro camino más sensato, pero más largo….
Yo no sé si es por quedarme sola, por el miedo que me han metido en el cuerpo, porque estoy cansada o qué….me siento incapaz de tirar palante, me cuesta cada paso que doy, el sol de frente…llamo a Luis como para pedir socorro, me acuerdo de Dolo,”..me tenía que haber ido con ella…”, pero no puedo volver, las dudas y el miedo, definitivamente, son las peores compañeras que te puedas echar…
Se oyen truenos, pero muy lejos…!bahh!......!tira anda!…
Sube y sube……llego a un pueblo por fin, y allí me como medio bocadillo, porque, hablando con una mujer que encuentro, me dice, ”…te queda lo peor…. no sé como hacéis estas cosas…..viene una tormenta…estas sola?...”, un señor me dice que no es para tanto, pero yo ya estoy perdida, muerta de miedo y con la tormenta encima….sigo con el salchichón en la boca y empieza a llover, me pongo la capa pero es imposible tapar la mochila (….pinta que tengo de jovencito Frankenstein…), …ya estoy empapada y no hay señales,”..tendrá que ser por aquí…”, los ojos ya los tengo como Mel Brooks de mirar los nubarrones, un relampago atraviesa el cielo por encima de los molinos (que hacen un ruido de miedo) y de unas torres de alta tensión que chisporroteannnnn……!otrooo!…!me pongo a rezar!, ¡lo juro!, ¡tres avemarías y un jesusitoooo!, ¡otras tres!, ¡halaaa!....me acompaño de esa forma y pienso que allí me quedo, pero santificada….jajjaja….cada vez hay mas barro pero ya estoy llegando, le doy gracias a la Virgen y paso del monumento al peregrino, solo quiero empezar a bajar ….
Me voy empapando del paisaje, de la tranquilidad que siento y de agua, claro, pero me da igual tó…
Hay muchas piedras y muy grandes en una pendiente muy pronunciada, pero eso, que paso de todo….
Llegando a Uterga, me doy cuenta de que no tengo un duro, la cartera se la quedó Dolo y que quedan 9 km a Puente la Reina y lloviendo así yo no voy….antes de entrar al pueblo hay una imagen de la Virgen del Camino…y rezo otra vez.
Me llama Dolo y me dice que está en el albergue de Puente la Reina, y yo le digo que ya nos veremos mañana que no voy hasta allá si se me arregla lo de los euros…
Lo primero que pregunto al entrar al albergue es si puedo pagar con tarjeta, es un albergue privado y moderno, está muy bien, y me dice que si…me relajo totalmente, allí me quedo….estoy yo solita y hace un día de perros, pero yo no puedo estar mas relajada ya…
Ceno como una marquesa y me voy a la cama porque mañana tengo que madrugar más para recoger a Dolores en Puente la Reina a una hora prudente……

La que se fue por el camino más fácil...yo , Dolo, se perdió al poco de salir y estuvo andando por una carretera que iba hacia otros pueblos. Paré en un pueblo muy agradable a comer el bocadillo y me entretuve viendo una iglesia preciosa. Allí pregunte a un lugareño (mal) y me indico un camino. Después de bastantes kilómetros y ya muy cansada alguien me grita desde un coche ¡no ...por ahí no! Era el lugareño...¡Si vas en otra dirección! Cambio de rumbo.Puedo atajar para no volver atrás y sigo andando por carretera todo el rato. Todavía lejos de Puente la Reina comienza una tormenta que no tiene muy buen aspecto. Mientras bajaba el puerto del Perdón comenzó a llover y tronar, me entro bastante miedo y baje como pude hasta Puente la Reina , medio llorando medio gritando .Al llegar al pueblo llamé a Marina y busque un albergue. Antes de cruzar el famoso puente que da nombre al pueblo se me apareció un ángel , si un ángel, no estoy loca. Se llamaba Miguel y era alemán, me indico, sin pedírselo, el mejor albergue.Allí pase la noche sin Marina , en su compañía y la de otros alemanes que resulto muy entretenida.